lunes, 23 de enero de 2017

Capítulo 12

"Necesito que nos juntemos en el café de la esquina de casa, cuanto antes mejor."-le texteé a Valentina ni bien me desperté, después de pensar y pensar, lo decidí; iba a terminar con ella.-
-¿Qué pasó? Estoy libre después del trabajo. ¿No queres venirte a casa?-respondió casi al instante.-
-Es mejor hablarlo en el café, a las siete de la tarde te espero ahí, puntualidad por favor.-le dije, no iba a ir a su casa, si de algo estaba convencido, era de eso.-
-¿Pero todo bien? Estás raro Pedro.
-Basta Valentina, cuando nos veamos te vas a enterar.-ya me estaba exasperando.-
Me levanté, me di una ducha y me propuse desayunar.
¿Qué haría en todo el día hasta que se hicieran las siete? Ir al gimnasio, necesitaba ejercitar y sacar la mala energía que estaba en mi hacía días.
Mientras que esperaba que pasara la hora para poder almorzar me jugué algunos partidos en el FIFA, si, era un vicioso de eso, amaba jugar a la play, igual más lo amaba cuando era con compañía.
Me preparé un almuerzo liviano, -si, me gustaba cuidarme; aunque se vea raro en un hombre.-me armé el bolso y me dirigí al gimnasio.
Luego de dejar todo en el locker y agarrar una toalla, decidí empezar con unos minutos de caminadora; para mi sorpresa, en una de ellas estaba Paula.
-¡Ey! No sabía que venías acá.-le dije dejando ver mi sorpresa.- 
-Pepe, hola.-dejo un beso en mi mejilla.-Empezamos hace una semana con Mica, pero hoy ya no vino.-río.-
-Es una vaga.-asintió en muestra de que estaba de acuerdo conmigo.-
-¿Y vos? ¿Cuando empezaste?
-Yo vengo hace como un año pero hacía varias semanas que no venía.-dije poniéndome en la cinta de al lado, que había sido recientemente liberada.-
-Con razón. Hay que convencer a Mati de que venga.-yo solo asentí.-
Estuvimos ahí, unos quince, veinte minutos hablando hasta que ella se fue para otro lado. 
Bicicleta fija fue mi siguiente parada, treinta minutos en cada aparato.
Cuando estuve exhausto me fui a bañar, para poder volver a casa y estar en hora en el café.
El reloj marcaba las siete menos cinco y yo ya estaba en el café, esperando a Valentina; que con seguridad, iba a llegar tarde, no se le podía pedir puntualidad.
Habían pasado quince minutos de las siete y Valentina seguía sin aparecer, ¿qué le costaba llegar en hora?
-¿Donde estás? Era a las siete que tenías que estar acá.-le mande mensaje.
-No jodas Pedro, ahora voy, estoy a unas cuadras.
Siete y media se digno a aparecer.
-Hola.-me quiso dar un beso, pero le corrí la cara.- ¿Qué pasa?
-Era a las siete no siete y media, ¿te pensas que yo estoy al pedo todo el día?-si, estaba enojado. Odiaba la impuntualidad.-
-Bueno, cálmate. No pude llegar antes.
-¿Te costaba avisar? Media hora esperándote como un pelotudo.
-Bueno, basta. Deja de quejarte. ¿Qué pasó?
-Tenemos que hablar.
-Na, ¿en serio? Pensé que nos juntábamos acá a comer nada más.-dijo con ironía mientras me interrumpía.-
-¿Me vas a dejar hablar?-asintió.-Gracias. Te dije de juntarnos, porque estuve pensando y me parece que esto no da para más.
-Esto, ¿qué?
-Nuestra relación. Está... ¿cómo decirlo? Algo, desgastada.
-Ósea, ¿me estás dejando?-asentí.-Ahora entiendo por qué no me respondía los llamados, ¿hay otra?
-No Valentina, no hay otra. Esto es por nuestro bien, ya se estaba volviendo todo enfermizo.
-¿Enfermizo qué?-levantó la voz y los que estaban cerca nos miraron.-
-No grites.-dije entre dientes.-
-Sos un ridículo Pedro, me estás dejando seguro por otra ¿y me pedís que no grite?
-No te estoy dejando por otra, estoy dejando porque sos uña controladora, celosa, infumable que me anda atrás todo el día, convirtiendo nuestra relación en algo enfermizo. Para controlarme están mis padres, vos sos, bah eras mi novia nada más.-si, le dije todo.-
-No podes decirme todo eso Pedro.-se hizo la víctima.-
-Y vos no podes llamarme cada dos segundos Valentina.
-¿Está mal que quiera hablar con mi novio?
-No, no está mal, cuando llamas mínimo cada dos horas, no cada un minuto. Estaba trabajando y me sonaba el celular a cada rato.
-Trabajando, claro.
-Me creas o no, es lo que estaba haciendo, y esto termina acá. Que seas feliz.
Llamé al mozo para pedirle al cuenta, le pagué, y mientras me levantaba para irme, escuché algo que me había dicho Valentina, lo cual me había dejado atónito.
Me sentía descargado, al final no había sido tan mala idea terminar con ella.
Caminé hasta mi casa, necesitaba asimilar lo que ella me había dicho y cuando llegué me desplomé en la cama, aunque no tuve ni un segundo de paz que ya me estaba sonando el celular.
-Cami.-dije con alegría al atender.-
-Pepito, ¿todo bien?
-Bien, ¿vos?
-Bien, gracias. Escucha, ¿te va cena con todos en casa?
-Dale, me baño y voy.
-Dice mamá que invites a Valen.-dijo irónicamente.-
-Vemos.-no iba a llevarla, estaba claro. Ya nada me unía a ella.-
-¿Vemos? Mete alguna excusa, no quiero verla.
-¿Ustedes no se llevaban bien?
-Se puso muy infumable.
-Bueno, nos vemos. Tengo que contarles algo.
-¿Sobre?
-Valentina.
-¿Está embarazada?-preguntó.-

Bueno, espero que les guste.
5 comentarios y mañana tienen otro (los anónimos con usuario de tw, sino no cuentan).

9 comentarios:

  1. Al fin la corto.. seeeee..mas encuentros con pau :)

    ResponderEliminar
  2. Mas encuentros con Pau.. Y que le dijo valentina a pepe?

    ResponderEliminar
  3. Ayyy Siii al fin dejó a la infumable 🙌🙌🙌 @rociibell23

    ResponderEliminar
  4. Que coj*n en el gym ya fue... @majolapedristaqueodiaapaula

    ResponderEliminar
  5. Al fin la dejo! Quiero accion con pau ahre. Me encanto el cap
    @celefrau_pyp

    ResponderEliminar
  6. Que bueno que terminó su relación, me gusta porque ya se nota un cambio de actitud de parte de Pepe con Pau

    ResponderEliminar
  7. Hoy empece a leerla por casualidad, me gusta💜 podrias pasarmela por tw? Es @BelnConti

    ResponderEliminar
  8. Ese finaaal Antonella.. por Dios!! Necesito más ahora.. nada amo la novela ya lo sabes..
    @natiamorporpepe

    ResponderEliminar